sábado, 16 de enero de 2010

Reincidencia causal a posteriori en favor de una metodología trascendental

Algo tarde al inicio del año, de regreso al teclado, aprovechando, aprovechándome, siendo aprovechado por estos instrumentos tecnológicos, que hasta no haberme sentado a escribir cartas por correo postal no había resentido o sentido, (resentido me quede conmigo mismo) la falta de la escritura, sin embargo ha ido reactivándose poco a poco.


Reincidiendo en este otro medio, de espacio virtual público, acerca del escrito anterior, que en poco tiempo, si más, no he cambiado tanto de opinión, creo que podría aclarar mi punto de vista y ampliarlo un poco más, a causa, de las escasas pero contundentes y apreciadas críticas que recibió aquella opinión escrita.


Comenzando con ese aire de idealismo catastrófico, que me parece carga en aquellas vagas palabras, aclarando que si bien el concepto de ciencia aboga por ser tan concreto, se confunde, se entremezcla, se evapora y termina por que no existe como objeto concreto susceptible a ser percibido y conceptualizado, o por ser gobernado, impuesto y manipulado por aquellas instancias políticas, que poco les importa la seriedad de la razón o el conocimiento, o bueno, solo cuando amerite un incremento en el capital, o en la deuda del asalariado.


Si vaya existe un concepto de ciencia bastante positivista arraigado ahora al sistema educativo, cosa que me recuerda un pasaje mientras estudiaba la licenciatura en psicología, ese forzado método científico, en donde en mi lógica no cabía como era aplicado a la subjetividad humana, y en ese momento hasta me sentía mal de no poder entender como aquellas variables dependientes e “independientes”, darían una explicación al comportamiento, razón, pensamiento, sentimiento, etc. observando, realizando hipótesis, “comprobando” y forzando conclusiones, reduciendo la investigación, a comparativos estadísticos, aplicando descontextualizadamente los resultados, que por si fuera poco, recité un libro al frente de unos inocentes “estudiantes”, bueno, siendo optimistas, mitad alumnos obligados a estudiar una profesión y mitad estudiantes, en una carrera técnica de enfermería, en donde, me pagaban por exponer una clase de investigación. Una de esas cosas que uno se arrepiente, pero bueno, errores de los que uno aprende. Exponiendo de memoria algo con lo que me encuentro en desacuerdo, en un principio intelectualmente, y en segundo término, emocionalmente, acudiendo a Kant, en desacuerdo con una lógica de la apariencia. División de la lógica general en analítica y dialéctica; Lógica trascendental; Crítica de la razón pura. (mis disculpas a esta pobre referencia bibliográfica, pero seguro la encuentran y si no le sacan la vuelta a Kant hasta podrían refutar, criticar o estar de acuerdo, no pensaba agregarla, pero me sirve como justificación del título que me parece muy bueno)


Si bien no me dispongo a entrar en terrenos epistemológicos psicoanalíticos en el presente escrito, en donde sería entrar también con las limitaciones de la teoría psicoanalítica, además de tener que servirnos de otras teorías, para contrastar, identificar puntos en relación y en el mejor de los casos poder complementar principios de funcionamientos psicológicos, ya sea individual, social, fisiológicamente, etc. (aclarando que también me encuentro sujeto a huecos de ignorancia en dicho campo).


O bien no caer en un que hacer artístico solamente, que para eso esta la sensibilidad de los artistas literarios, de artes plásticas y demás, que si bien, uno puede no limitarse a un quehacer intelectual y ampliar sus campos a terrenos artísticos, mas no mezclar solo por capricho, refiriéndome a asuntos concernientes al alma humana, en donde si bien mucho lo han intuido los artistas, no llega a una teorización, sin dejar, el aprecio de los teóricos por dichas obras. Este punto se me impone a frases como: “Es que eso que dijo (Freud, Lacan, Klein, Kant, Schopenhauer, Nietzsche, etc.) ya lo había propuesto tal o cual escritor”, y vale que si, pero no lo asimilo y construyó un sistema que busque dar explicación a dicho fenómeno del alma humana apegándose a una metodología. Además de otras premisas como, “El quehacer del psicoanalista es un arte”, o premisas Lacanianas como, “Solo hay que pasar por un proceso psicoanalítico para ser psicoanalista”, que si bien yo no se si eso dijo Lacan, así es parafraseado, si la experiencia clínica psicoanalítica implica un encuentro en la subjetividad, semejante al del encuentro estético me parece que lo así se lo he escuchado a los lacanianos, vaya que hay aún mas, agregando la ética en psicoanálisis y la teorización psicoanalítica. Claro, la escucha de otro es muy susceptible a un cambio en el sujeto que emite su discurso, no hace falta ser psicoanalista para que ocurran cambios en la subjetividad humana.


Después de haber dado un giro o mas bien oscilar entre cuestiones científicas, epistemológicas, sociales, psicológicas y mas en concreto psicoanalíticas, no anhelo por un solo saber científico, que releyéndome, me parece que apunto a una diversidad y delimitación de los campos del saber y una justificación de los mismos, así como de la psicología, que si bien el conocimiento trata de estar en constante movimiento, levantando barreras y traspasando límites del conocimiento, con y por esas sutilezas del alma humana de ir mas allá, ya que de lo contrario caeríamos en ese andar en círculos o recitar a manera de ritual religioso mitificando autores y demás. Y bien siempre habrá charlatanes que traten de hacer trampa intelectual, y en el mejor de los casos genios incomprendidos que pasen desapercibidos y sean arrojados a la hoguera por contradecir lo establecido. Mi optimismo me deja a la esperanza que nuestros prejuicios no nos dejen sordos a la voz de la razón y al sujeto que emita dicho mensaje.


Por último dejare este monumento, a la apreciación e interpretación, y que la hermenéutica se haga cargo de la óptima interpretación de estos pensamientos.

domingo, 29 de noviembre de 2009

¿Para qué?

En fin… o en principio… la razón, si es que importa escribirla, irónicamente, por la que escribo poco, es que cuando escribo tengo que tener la certeza que amerita ser escrito, y no solo en el sentido racional y estructural, que vaya considero importante, ese momento de claridad en la cual uno puede estructurar todo ese flujo de ideas, si no, la intuición, en el sentido de uno mismo, de sentir que uno sabe, eso que se escribe, es. Me atrevo a decir, como dirán algunos que se “alinean los planetas”, en el que se alinea el espíritu, el psiquismo en el sentido psicoanalítico, una alineación tópica, la cual permite reconocerse a uno mismo, y en un momento sublime, existe la posibilidad de crear, y dejar una huella de uno mismo que aunque sea insignificante para el mundo, es trascendente para uno mismo, un monumento a eso que uno fue, y que cada vez que se admire, nos recuerda quien fuimos, y quienes somos en esencia. Cabe mencionar, esto no es una propuesta teórica, por si llega a haber algún lector psicoanalista, aunque no descarto tal vez de pie a alguna, ya una vez en pie el monumento, quedara como recordatorio.

Entonces de un estado entrañado de ideas, enmarañados pensamientos, inhibidos, sofocados y demás, regreso a la pagina en blanco, que a modo de ironía nuevamente, llega a mi consciencia aquel pensamiento acerca de aquello que llaman “inteligencia emocional”, la cual no es el punto central de este escrito, sin embargo se me impone una pequeña reflexión, un tanto o un mucho influenciado por leer “(triste) situación de la psicología” del profesor David C. Flores, “Psicología: Ideología y Ciencia” de N. Braunstein, y asociados, además de diversas clases en las cuales se ha abordado, o irrumpido con diversas opiniones unilaterales en cuanto a las neurociencias y lo cognitivo conductual, que si bien, las neurociencias son malinterpretadas por una diversa gama de psicólogos o psicologías, de las cuales los cognitivo conductuales tienen la noción de ser sus mas fervientes aliados, (ya que mas les queda) aunque tengan un dominio social en cuanto al “reconocimiento” de su campo, proclamándose los auténticos psicólogos científicos y demás, y siendo reconocidos al servicio de la sociedad, clase dominante o, y, u, a, dígase universidad(es), sin importar las contradicciones que pueda tener para la técnica conductista (aunque no pasen de servidumbre de las “ciencias modernas”), el añadir, lo cognitivo, Skinner y Watson se revuelcan en su tumba, decir psicología cognitivo conductual, nos presenta una doble contradicción, en donde lo conductual no se permite ser cognitivo, y en cuanto a la psicología, por etimología queda fuera de contexto, a menos que se reconozca que el espíritu es conducta, y que se utilice de manera coloquial no implica que sea verdad, muchas cosas se han considerado como verdades por una mayoría a lo largo del tiempo, en donde terminan por ser descartadas, al someterse a un riguroso examen intelectual, científico, en donde ahora me percato, que casi se me escapa, la contradicción, o el error de considerar al conductismo como ciencia, que si bien, podrán funcionar en cierto contexto sus técnicas y descripciones en los ratones, antes al menos usaban ratones, (lo cual no estoy a favor, ¿¡que culpa tienen los ratones!?) ahora usan modernos programas en donde un ratón virtual es condicionado o utilizado para la verificación de datos en las neurociencias, lo que por cierto un médico con el cual tuve una pequeña conversación exclamó: “De que me sirve ese ratón si en principio ni siquiera caga”, lo mismo en cuanto a lo que respondió a un compañero psicólogo diremos, con muchas ansias integracionistas, cosa que pasa por los pensamientos de muchos psicólogos, al saber que existen varias psicologías, caso que llegue a ver en compañeros en los primeros semestres de la carrera, aunque muchos siguen conservando esa idea, siendo que ya están en área clínica, próxima a desaparecer por cierto, de la bonita facultad de psicología, de la U.A.N.L. con todo y su raquítica biblioteca, pero eso si, ya tienen Wi-Fi y mesitas nuevas, continuo; comenta aquel compañero de la maestría o master, “Es que yo quiero hacer mi tesis acerca de lo que pasa en cuanto a lo neurológico y lo psicoanalítico paralelamente en los procesos psíquicos”, y el médico responde: “No se puede, alguna ves tuve esa idea, pero en las neurociencias son transmisores y receptores, “moléculas de pensamiento” (en tono sarcástico)”, ese tipo de pensamientos pasan por un montón de psicólogos, como: “voy a integrar el psicoanálisis, el conductismo y la biología”, claro, se pueden integrar muchas cosas, si uno deja de lado la epistemología, entonces uno deja de ser científico, y resultan aberraciones quiméricas como la “psico-magia”, y ese tipo de cosas, o los conductistas que dicen: “Es que yo hago muy buena transferencia”, que los “yoes” tienda a la síntesis, no implica que a las ciencias, técnicas y magias, se les tenga que hacer lo mismo.

Volviendo al punto de la “inteligencia artificial”, digo, “emocional” entonces tenemos que ser inteligentes con lo que sentimos, me parece algunos dicen, que se tiene que ser asertivo, y ser coherente con lo que se dice, con lo que se piensa, con lo que se hace, con lo que desea, y hasta ser realista, pero sin dejar de ser optimista, pero jamás idealista, por que eso de la fantasía es inverosímil, “¡Dígaselo al Ello!”, ahora resulta que en el psiquismo no se condensa, ni se desplaza nada, y podemos ser inteligentes al respecto, aplanando lo imaginario, (lo real y lo simbólico también ya que estamos en eso) teniendo solo proceso secundario objetivo y racional, siendo objetos inteligentes, (Autómatas con engranes bien aceitados) sin proceso psíquico primario (¡AMÉN!)

Sin embargo todo esta pequeña reflexión acerca del conductismo, psicologías, magias, esoterismo, ciencias y psicoanálisis, se dirige precisamente al grado psicoanalítico, en donde ya una vez entrado en estos terrenos, y teniendo una formación, en su (o debería decir, en mi) mayoría clínica, llegué a un curso, de “Psicoanálisis y filosofía de la cultura”, en una facultad de filosofía, y a partir del mismo compañero, que no esta conforme con que tendría un grado de doctor en filosofía, (eso si esa gran tesis llegase a no se como efectuarse, y además extenderla y proponerla como tesis doctoral), le gustaría tener un grado de doctor en psicología, recuerdo la historia del psicoanálisis en la Facultad de psicología de la U.A.N.L. como profesores buscaron y con la frente en alto libraron batallas contra el conductismo de moda, y la neurología, además de cómo antes, la carrera de psicología estaba posicionada en la facultad de filosofía, y que ahora la resistencia impuesta de una manera descomunal con el ISO-XXXX) esta norma de calidad esclavizante, digo… estudiantil, se disuelven las áreas de acentuación, (TODOS CONTRA TODOS, SALVESE QUIEN PUEDA) alumnos dentro de un caos teórico, sintético y sintetizado, logran su objetivo, formar licenciados en psicología sintética, probablemente lo siguiente sea que la carrera se efectúe vía internet, y ya ni siquiera valga el tener una facultad de psicología, en fin, entonces regreso a mi caso, en donde una vez elegido mi campo de estudio, y me encuentro en formación psicoanalítica, aunque no plenamente en forma, que eso queda en un “próximamente”, me encuentro con opiniones de mas personas en formación, que opinan que el psicoanálisis podría ser tomado como filosofía, (Un trueno cae en la tumba de S. Freud retorciéndose ante tal declaración), que si bien, no demerito a la filosofía; su que hacer, no es el mismo del psicoanálisis, que cabe mencionar, la filosofía históricamente a estado íntimamente ligada a la ciencia, vale decir, es la madre de la ciencia, donde habrá que tomar con pinzas y navaja epistemológica (como tanto nos remarca David Flores), así como, el contexto histórico de cada ciencia o estudio del conocimiento.

A manera de finalizar esta breve reflexión, ¿para qué, tantas guerras, batallas y conflictos intelectuales y no intelectuales, (que por el antisemitismo casi se llevan al psicoanálisis “entre las patas”) para legitimizar el psicoanálisis como ciencia, como psicología, pese a todo el contexto o implicación que tiene la bofetada a la humanidad postulando al sujeto divido, sujetado por un inconsciente, y la noción del libre albedrío, si los mismos estudiantes del psicoanálisis, o incluso los mismos psicoanalistas, terminan por preferir quedarse en una conceptualización del saber a manera filosófica, en que se habla metafísicamente, en dejar el rigor de la metodología, en corromper la clínica, en hacerse dinámicos, integradores, en negar a S. Freud en el nombre de J. Lacan, en reducir la teoría a técnica psicoanalítica, con intervención en crisis, terapias focales, en “Pro” de la demanda social (obviando que la sociedad demanda y no hay diversos estatus sociales, claro… todos somos iguales a los ojos de…), creando clínica con enfoque psicoanalítico, descuadrando encuadres, “psicoanálisis” itinerante y hasta por internet, (en el nombre de lo imaginario), o, sosteniendo que la entrevista no basta, hay que aplicar pruebas psicométricas y proyectivas para realizar un psico-diagnostico para legitimar quien es apto y quien no, para un psicoanálisis, (claro los que aplican Rorschach también quieren pastel) ahora resulta que las manchas y la estadística son parte de los criterios para iniciar un proceso psicoanalítico, (¿y el deseo del sujeto?)… ?

¿Para qué?

jueves, 10 de septiembre de 2009

Café, cine, Nietzsche y una amiga enferma gritona, en otra noche lluviosa, no tan tormentosa (dos años después)

Y entonces una idea en mi cabeza, revoloteando como una polilla a una bombilla encendida ((aunque con esta metáfora no se si la idea es la polilla o la bombilla encendida) (me agrada mas polilla que "palomilla" y bombilla que "foco")) en fin... de aquel pequeño escrito con el que inicie este blog, el cual me agrado al comenzar y sin embargo solo publique un par de entradas y lo deje empolvarse de polvos virtuales, del cual tenia tantas ganas de continuar, sin embargo, opte por leer más y continuar después, que se ha convertido en un "ahora", en ese entonces, cuestionándome ociosamente: "¿lo que es bueno para mi, es bueno para los demás?", con tres situaciones en contextos sin parentesco, al menos directamente, aunque tratare de darle un cierto sentido un poco mas delante, tratando de no forzarlo de más, y no caer en simples racionalizaciones haciendo tapaderas de mi error.

Aquella idea polillezca inquietante, es acerca del primer aquel ejemplo, la madre llevando a su hijo a la aplicación de una dolorosa inyección, la cual, lo doloroso es para el niño, en este caso un niño que tiene cierta fobia a las agujas, con su respectiva subjetividad de por medio, fantasma, fobia sintomática, desplazándose y consensándose en dicha representación, existe un saber, que posee la madre, que este caso esta justificado, o justificándose, un conocimiento acerca de cierta parte de la realidad, un tanto estructurado (si fuese el caso que la madre sea médico de profesión, biólogo, o alguna profesión afín) o simplemente por que la cartilla del seguro dice que el infante debe someterse a un determinado numero de vacunas para prevenir, el virus, o que el médico familiar, a recomendado dicha inyección, en pro de combatir algún virus que ocasiona cierto malestar.

Conocimiento que el niño desconoce, y fuera del fantasma fóbico, le dará un sentido, ya sea de agresión, o retaliación, dirigida hacia él, de aquella madre, proveedora, “suficientemente buena”, en el mejor de los casos, cómo define D. Winnicott, "¿que te he hecho yo madre? ¡para merecer semejante castigo!", podría replicar aquel infante, aludiendo al “pecho malo” de M. Klein (no me refiero a alguno de los pechos de la Sra Klein, aludiendo a que tuviera algún pecho defectuoso, si no, al teorizado en su obra, evadiendo a la problemática de si su teorización era buena o no) sin embargo, como menciona S. Freud, en aquel ensayo el cual no quería publicar, y que fue publicado, y hasta traducido sin su consentimiento, (jeje, valga la ironía) "El apremio de la vida" en "Proyecto de una psicología para neurólogos" al que esta sujeto, el ser humano, debido a aquella condición de des valides, en la que se encuentra al nacer, y a riesgo de sonar "lacaniano" de los mediocres ("al vapor") que ni a S. Freud acaban de leer, doblegando el lenguaje o haciendo juegos de palabras, la que viene a hacer valer, termina o empieza, siendo la madre, donde rodeare la conflictiva de la conformación psíquica, en donde un sujeto, se conforma como sujeto y se asume como tal (en el mejor de los casos), que deriva a una justificación del acto.

Sin embargo, en el segundo ejemplo, acerca de la ruptura amorosa, que puede o no, desencadenar un "quebranto corazonal" como denomina el profesor D. Flores al conflicto neurótico, (para evitar conflictivas llamaremos al quien propone terminar la relación Sujeto A, y al que es despechado o despachado Sujeto B) , me parece, que al ser envestido Sujeto A, con tal poder, halo o admiración idealizada, por el Sujeto B, como lo maneja S. Freud en "Psicología de las masas y análisis del Yo" en la cuestión del enamoramiento, sugestión, hipnosis y fenómenos de la masa con respecto al caudillo, por un lado el Sujeto B, se somete voluntariamente a la voluntad del Sujeto A (se pone de pechito), en donde dicho Sujeto A, asume de cierta manera este poder, y pudiera ser, que por algo que le haya aprendido a aquel "Apremio de la vida", con un malentendido de por medio, aplique esta lógica malentendida de: "Yo se lo que es mejor para ti".

Llegando al tercer ejemplo, en donde cierto país, o comunidad, arrasa con otra, (podríamos también, denominar Comunidad A y Comunidad B), que ante tal acto de agresión y sometimiento, esta vez, siendo involuntario por la Comunidad B, se hace valer por medio de su justificación, sacada de la manga o de algún libro antiguo (donde el hecho de ser el primer “Best seller”, no hace que tenga la verdad única e incuestionable), en el nombre de Dios padre, Cristo, el gran hermano, o quien quiera que este de moda en el contexto, para practicar un genocidio, guerra, o cierto tipo de conflicto masivo, (que para agregar a la ecuación, podríamos denominar "Aquel X que me respalda"(no quiero decir "Otro" por que luego se enojan los lacanianos, ya que la verdad a J. Lacan, siendo honesto, solo lo conozco por terceros), borrando casi por completo del mapa a la Comunidad B, y adaptándola a su imagen y semejanza, siendo el inverso de la ecuación propuesto en el ejemplo 2, cayendo si no es que me equivoco teóricamente, en un discurso de tipo paranoico cayendo en otra lógica malentendida de: “Yo se lo que es mejor para todos”.
De esta manera me parece, se pueden intelegir de una manera mas lógica y coherente, dichos ejemplos, que esta continuación, cabe mencionar no busca dar respuesta a la cuestión "¿Lo que es bueno para mi, es bueno para los demás?". Sin embargo, podríamos suponer, que debido a una malinterpretación de un mensaje, a priori, (enunciado por un deber, del "Apremio de la vida", (que podrá o no, asumir)) que podrá ser transmitido, con sus respectivas deficiencias de comunicación, como el juego infantil "El teléfono descompuesto", para dar a posteriori, un mensaje deformado, con la creencia, de ser una verdad absoluta emitida por Aquel X que me respalda, o por el ceder aquel poder a un Sujeto A, que dice poseer el saber, de que es bueno para el mismo Sujeto A, y para el Sujeto B.

Cabe mencionar el agradecimiento, acerca del trabajo realizado en el Grupo operativo, Coordinado por el Profesor Rodolfo Álvarez, del artículo, “¿Entendiendo el malentendido?” de Horacio Foladori.

Para terminar, y justificar el por qué del título de esta publicación, me permitiré citar a F. Nietzsche, proveniente de "Cómo se filosofa a martillazos": "Nosotros negamos a Dios y, al hacerlo, negamos la responsabilidad, sólo así redimimos al mundo."

lunes, 24 de septiembre de 2007

El principito y su asteroide narcisista B-612

Siendo victima de mi rush cafeinico, mis asociaciones me invaden, en busca de una satisfacción acudo a este medio, donde no basta con su, represión, digo, representación fantasmática (en un sentido meramente poético), me pregunto mientras escribo, ¿por qué tuve ese lapsus palabras atrás?, jaja, y no obstante, ¿Por qué mi afán por evidenciar mi lapsus?, bueno eso si lo llego a asociar en mi análisis, será buen material, jeje, en un intento de descifrar, con un tanto de racionalización y un toque de intelectualización, trato de dar un sentido aproximado con la explicación de que me quede en la segunda pagina del articulo de “La represión”, a causa de que me corrieran del lugar a donde fui a intoxicarme con café… en fin… al rato retomare mi lectura.

Recordando un par de semanas atrás, donde realice una relectura del librito “El principito”, que movió muchas cosas sentimentales e intelectuales, en adición a retomar mi lectura Freudiana, la cual siento que aun está en pañales, aunque de igual manera me atreveré a realizar una serie de conjeturas e hipótesis psicoanalíticas un tanto o un mucho silvestres, referentes al buen principito, tomando como punto referencial el articulo de “Introducción al narcisismo”, del profesor S. Freud (traducción directa del alemán de Luis López – Ballesteros y de Torres.)

El principito, el pequeño príncipe, que algún día podría a llegar a ser rey, o al menos su titulo de nobleza da pie a pensar que existe o esta enunciada tal promesa, donde llega la primer asociación referente al texto de S. Freud, ese momento narcisista del “sujetito” (estas comillas no son de cita), recién nacido, donde “Habrá de ser, de nuevo, el centro y el nódulo de la creación: His Majesty the baby, como algún día lo creímos ser nosotros.” (esto si es cita textual de S. Freud), que lo enunció con palabras que no le veo razón para decirlo de distinta manera, donde el sujetito, no esta sujetito al mundo real o externo, sino al deseo de los padres. A ese lugar perdido que ingenuamente creímos, y que tercos aspiramos a retomar, así como regresar a un bonito asteroide etiquetado como B-612 y haciéndoles creer que esta sujeto a las normas sociales, donde no hace falta mas que un par de volcanes, estar al pendiente que no crezcan los Boabs, y ver el atardecer.

Donde hasta cierto punto todo parecía ser tan genial, aun y cuando algunos crean que es un tanto melancólico, y tal vez llegue el punto, pero aun no es el momento, si no hasta donde uno se da cuenta que no alcanza con el mero asteroide, y se abre otro camino, algo mas, algo así como una bella flor, que modestamente se proclama como única y en una disposición un tanto o un mucho demandante, ya sea de cuidados, cariño, protección… otro punto que encuentro muy parecido al texto del profesor S. Freud en donde enuncia ese amor narcisista, cuando refiriéndose a la tendencia en las mujeres, donde me parece que al decir mujer se refiere a mujer psíquicamente hablando, o al menos eso alcanzo a comprender, me llamó la atención la frase de "No necesitan amar, sino ser amadas, y aceptan al hombre que llena esta condición" (también cita textual del articulo antes mencionado) me parece que es mas delante cuando se esta lejos de la flor que se quedo con el amor, y podría ser un momento un tanto melancólico. Sin embargo, me da la impresión que aun y cuando el pequeño príncipe reconoce la belleza de la flor, no es hasta el momento que la zorra le abre la posibilidad a la domesticación, o a entablar lazos con alguien mas, con los objetos, que hagan de esa flor única, así como ya se había proclamado en un principio con tanta modestia, aun y cuando en la realidad existan millones de flores insignificantes para los geógrafos, de igual belleza, esa flor que aun así da pie a la duda, de quien domestico a quien, y que de igual forma cabe la posibilidad que es lo que menos importa, y dependerá de la subjetividad de los respectivos domesticados. (que curioso, recuerdo a algunos maestros utilizar la palabra domesticado refiriéndose a pacientes en análisis donde creo que se referían a una vez que el paciente a vencido esas fuerzas resistenciales que le impedían llegar a una asociación libre). Por otro lado, creo que el libro a pesar de ser breve, podría llegar a ser victima de más agresiones analíticas, pero es todo lo que tengo que escribir por el momento.

Para finalizar se me ocurre agregar lo curioso e interesante, el hecho de que al fracasar en el entendimiento del mundo adulto de la tierra, la mordedura de la serpiente, sea el medio para regresar a bello asteroide narcisista B-612.

Aclarando que lo escrito aquí sigue siendo de una manera informal y sin un objetivo científico, solamente como un medio para descargar lo que se me ocurre y poder llegar a conciliar el sueño.

Referencias bibliográficas:

"El Principito" de Antoine Saint Exupéry 1943

“Introducción al narcisismo”, del profesor S. Freud 1914 (traducción directa del alemán de Luis López – Ballesteros y de Torres.)

lunes, 27 de agosto de 2007

Café en una tarde lluviosa...

Así doy comienzo a este espacio, después de una buena tarde de café, en un día tormentoso, bueno, solo un poco… sin esperar que alguien llegue a leerlo, con el deseo que muchos los hagan, siendo esta una parte importante en mi vida, una manera de dejar al descubierto mis pensamientos, sin tener que perforar mi cráneo para que toquen mi cerebro, lugar donde los psiquiatras “””ubican el pensamiento, el alma, emociones, y sentimientos. Ya todo esta bien ubicado en cada zona o región, hasta, el inconciente, claro…”””, como iba Yo diciendo, un espacio catártico en el cual plasmare algunas reflexiones, de una manera informal, donde esta de mas decir personal, y de antemano subjetiva, sin embargo espero no sea aburrida, al menos no lo es para mi.

La vida es tan simple, tan bella y justa, tanto que es aburrida…

Y ya que como buenos homosapiens, hemos evolucionado tanto para adquirir tal vez, de una forma adaptativa, el tan elaborado recurso de la negación, que comenzamos por negar y tratar de dominar… ¿nuestra naturaleza?, o tal vez… ¿nuestra parte natural?, que no es lo mismo que a la naturaleza misma que también tratamos de dominar y someter a nuestra nece… dad… o comodidad, al menos eso tratamos o nos gusta creer, siempre en nombre de la humanidad, o incluso, hasta en nombre de Dios, que de esto se me ocurre la pregunta (muy probablemente no sea el primero, casi seguro, pero si me pusiera a enunciar certezas y no ocurrencias, esto perdería el punto reflexivo y terminaría por ser informativo o incluso un discurso perteneciente a una locura diferente a la mía, donde cabe la duda, o abunda) en todo caso la pregunta llego a mi pensamiento es: ¿lo que es bueno para mi, es bueno para los demás?, haha, me da risa… “los de más… que están de sobra… los cuales me gusta pensar que no necesito y todos absolutamente todos están equivocados” (las comillas no son para cita textual, solo imagínenme con las dos manos al frente haciendo un movimiento con mis dedos índice y… el grosero(de en medio), arriba y abajo simulando comillas), tal vez me hubiera evitado tanto parloteo si hubiera escrito los otros, pero no hubiera sido tan divertido, aunque el “hubiera no existe”(estas si son de cita, aunque sea a nivel cultural), aunque yo creo que si existe, pero existe en la esperanza, la esperanza de que todo pudo haber sido mejor, y poder soñar… aunque no siempre por la misma razón.

Retomando aquella pregunta de reglones atrás, arriba o hace ratito, un tanto o un mucho egoísta, algo evidente, que vienen a mi algunos ejemplos, tales como: “yo se que no te gusta mijito pero es lo mejor para ti” (madre diciéndole a un niño con fiebre mientras le suministra una inyección), “yo se que te duele ahora, pero el día de mañana me lo agradecerás” (esa también era aplicable a la madre, pero en este caso fue la frase de ruptura en una pareja (esta frase puede ser utilizada tanto por hombres como mujeres), “hemos destruido sus casas, matado a sus hombres, violado a sus esposas, y perdido a algunos de nuestros jóvenes mas prominentes, pero con Dios como mi testigo, esto es por su bien” (esta frase parecería de un jefe vikingo después de arrasar con una aldea, pero no, al menos el jefe vikingo puedes asumir que lo hizo por joder, por gusto o por que se le acabaron los suministros y son muy flojos para cazar, recolectar y pescar, o simplemente solamente saben pelear, de antemano que sus mujeres no eran tan guapas que digamos, pero en fin… esto, palabras mas, palabras menos, o sea que no es textual, sale de palabras de políticos después de arrasar con un país terrorífico, tan tan tan (a riesgo de parecer campana), grotesco y espeluznante, que piensa diferente, con costumbres propias y a veces hasta características físicas diferentes a las de aquel país o población, volviéndose así horribles monstruos peligrosos, aquellos que residan en la población atacante, al tener alguna relación con la población terrorífica.)
Cabe mencionar que las tres situaciones se encuentran en contextos muy diferentes, y con una justificación muy distinta, tal vez el niño estaba muy enfermo y la manera mas efectiva a que recuperara la salud era la inyección, tal vez la persona que decidió terminar con aquella relación se dio cuenta que el amor se acabo o se encontró a alguien mejor, ya sea con mejor carro, mas dinero, mas paciente, mas atractivo(a), “mas mejor” (haha), y en el caso del tercer ejemplo… no se me ocurre nada… tal vez, podría justificarse, a menera del “mas” como: mas dinero, mas recursos, mas territorio, o simplemente como chivo expiatorio, sin embargo el punto no es el justificar o enjuiciar a nadie, por si alguien llego hasta aquí, creo que si tengo un punto aunque no lo parecezca, es solo la pregunta… no tengo la respuesta, al menos no la respuesta de libro de texto de primaria, que a comparación de un 2+2=4 (que tal vez un fisico o un matematico pueda justificar que hay mas de una respuesta para eso, haha, no lo se), algo que es diferente es que le de un sentido a esa pregunta, un sentido que me parece lógico, el cual no expondre en este espacio, ya que no es con una intención de debate, cada quien puede (no en el sentido permisivo, sino en el sentido de lo posible) tener su respuesta, tal vez la siguen buscando, tal vez cambie de opinión, tal vez a nadie le importa, tal vez deberia de tomar café, “definitivamente tal vez” (oasis hasta donde conozco). “¿Lo que es bueno para mi, es bueno para los demás?”…